El bloqueo internacional y la política nefasta del antiguo presidente de PDVSA, Rafael Ramírez afectaron la producción de la industria petrolera venezolana.
Así lo aseguró este domingo, Manuel Páez, dirigente sindical petrolero y miembro del estado mayor presidencial de los Consejos Productivos de Trabajadores y Trabajadoras (CPTT) hidrocarburos, durante su participación este domingo en el programa Análisis Situacional que conduce el presidente de Hinterlaces, Oscar Schémel.
«La industria petrolera sufrió las consecuencias de la política nefasta de Rafael Ramírez, sobre todo en el mantenimiento preventivo y correctivo de las instalaciones», dijo durante la entrevista.
Aseguró que en 2015 por las sanciones comenzó la afectación de la industria y evitó un normal desenvolvimiento en las operaciones, luego vino el bajón en los precios del crudo en 2020 que llegó casi a cero.
«En febrero 2020 comenzó una nueva etapa de recuperación para la industria a solicitud de los trabajadores y el presidente Nicolás Maduro lo hizo, hoy en día se ven los resultados debido al compromiso de la clave obrera que está asumiendo un papel histórico, la producción viene superando el bloqueo y las sanciones», dijo.
Destacó que los CPTT han sido fundamentales y han asumido el papel de en la recuperación económica de forma sostenida y permanente, además han logrado recuperar su calidad de vida, explicó que han impulsado el nivel de conciencia.
«Se está preparando a los trabajadores con la certificación de saberes, se han recuperado los beneficios laborales y eso es importante».
Apuesta al capital extranjero
Páez aseguró que es necesario el capital extranjero para recuperar la industria al 100%. «El capital debe generar un papel integral en la nación, ese capital debe recuperar la calidad laboral para los trabajadores, los espacios recreativos, alimentación, transporte, salario y a cambio nosotros nos ofrecemos a cumplir con lo que sabemos hacer que es petróleo. El capital ha tenido en Venezuela todas las garantías jurídicas», agregó.
Recordó que la Connstitución establece que la inversión privada tiene un beneficio del 49% de las ganancias y 51% para el Estado.
«Vamos camino a una victoria económica, la venta de las acciones del Estado es muy acertada porque ha dejado atrás la dependencia económica».
Acotó que la reforma a la Ley de Hidrocarburos debe tener tres aspectos fundamentales, recoger todas las leyes en una, que PDVSA se convierta en una operadora petrolera nacional y la participación de la clase obrera, es decir, abrir una nueva forma de comercialización.
«Queremos que el capital recobre su ganancia del cobre de la producción, eso garantiza que la producción tenga eficiencia, los trabajadores deben cuidar que la inversión sea destinada para lo que fue acordado y que la productividad se recupere, además se ha planteado la posibilidad de generar un fidecomiso entre el Estado y el capital privado eso permite garantías jurídicas».
Destacó que los trabajadores deben asumir la dirección del proceso nacional del trabajo para asumir las decisiones en colectivo con el capital del Estado. «El sector necesita una representación sindical legitima y legal que sea la cara de los trabajadores en colectivo en conjunto con la clase obrera. Queremos una dirigencia sindical que trabaje con la clase obrera, queremos recuperar los beneficios perdidos por la clase obrera, necesitamos espacios para el debate».
Finalmente dijo que se necesitan nuevos líderes en todos los sectores del país para afrontar los problemas en común.
Narkys Blanco