El canciller venezolano Yván Gil intervino este 26 de septiembre en la Asamblea General de Naciones Unidas, reafirmando la posición de Caracas frente a las presiones externas y destacando el papel histórico del país en la defensa de la independencia, la paz y la autodeterminación de los pueblos.
Historia de resistencia y proyecto bolivariano
Gil recordó los cinco siglos de luchas que han marcado a Venezuela, desde la resistencia indígena contra la colonización hasta la gesta independentista liderada por Simón Bolívar. Subrayó que, tras décadas de gobiernos subordinados a intereses extranjeros, fue en 1999 con el comandante Hugo Chávez cuando se consolidó un proyecto soberano y democrático, hoy continuado por el presidente Nicolás Maduro.
Sanciones, agresiones y solidaridad internacional
El canciller denunció las más de 1.042 sanciones aplicadas contra Venezuela, los intentos de magnicidio, incursiones mercenarias y amenazas militares que, a su juicio, buscan imponer un “cambio de régimen” y apoderarse de las riquezas naturales del país. Frente a ello, destacó el respaldo recibido de bloques como la CELAC, los BRICS y el Movimiento de Países No Alineados, que han rechazado las medidas coercitivas y defendido el derecho de Venezuela a la paz y al desarrollo
Venezuela en el mundo multipolar
En un discurso marcado por referencias a Irak, Libia y Afganistán, Gil situó a Venezuela como parte activa del nuevo orden multipolar, contrario al hegemonismo y a las guerras interminables. Ratificó la solidaridad del gobierno venezolano con Palestina, Cuba, Nicaragua, Irán, Rusia, China, Argentina y Puerto Rico, reafirmando la visión bolivariana de un mundo de equilibrio, justicia e igualdad
Compromiso con la paz y la autodeterminación
Gil cerró su intervención asegurando que Venezuela “no ha sido, no es ni será jamás una amenaza para nación alguna”, y que continuará defendiendo la paz del Caribe y Sudamérica. “Venezuela ha sido, es y será siempre una esperanza en la construcción de una nueva humanidad, de un mundo de iguales, sin imperios ni chantajes”, afirmó.